Amante del gran musical

ADA ORAMAS

Tony Díaz, director de la compañía Mephisto Teatro. Tony Díaz empezó su carrera en la escena cubana como un diseñador de luces de gran creatividad y con un dominio técnico que realzaba las puestas de otros creadores, estudios y experiencia le llevaron a concebir puestas en escena de teatro dramático con un grupo de actores que constituyó la génesis de la agrupación que dirige, Mephisto Teatro, con la cual ha incursionado en varios títulos de ese género, como Escándalo en la trapa, todo un suceso en la escena cubana. Pero otro género lo imanta por la complejidad que implica su carácter multidisciplinario: el gran musical, que le ha impulsado a montar sus más recientes puestas en escena, en La sala Tito Junco del complejo cultural Bertolt Brecht, acoge un nuevo triunfo de la compañía Mephisto Teatro: Cabaret, Plácido y, ahora, Chicago. Con un argumento propio de thriller que ha conmocionado al público desde su estreno mundial, ocurrido en junio de 1975 en Broadway, este título ha sido traducido a ocho idiomas, representado en 24 países de los cinco continentes y presenciado por más de 17 millones de personas. -¿Por qué elegiste una obra con tanta historia, acaso intentas un reto con tu versión, después que la ha visto medio mundo en escena y en pantalla? -No intento establecer paralelismos, ni retarme a mí mismo y al grupo con este proyecto quizá un tanto temerario. Teniendo en cuenta que estamos cultivando el gran musical, pensé que por ser Cabaret un título antológico del gran musical, podríamos otorgarle nuestra propia visión y nuestros propios códigos, adecuándola al escenario en que trabajamos, a nuestros códigos y al estilo en que traducimos nuestro lenguaje, nuestro modo de expresarnos en sus claves, con las cuales obtuvimos un buen respaldo del público, en Plácido y en Cabaret." -¿Cuáles son los mayores méritos que posee esta obra para llevarla a escena en Cuba? -En mi opinión, posee todas las cualidades inherentes a un gran musical en sí mismo, avalado por la firma de los autores de Cabaret, texto de Bob Fosse y música de John Kander y Fred Ebb, que presentamos recientemente y la consideramos una de los obras de mayor afluencia de público hacia la compañía y pensamos que este título podría repetir la historia. Se trata de un musical que toma carácter de leyenda y, como siempre, primero fue una obra de teatro y después se convirtió en película que rompió records de taquilla. Nuestra versión está basada en el texto teatral y hemos trabajado sobre ese original." -¿Y en cuanto a la parte musical? -Para la música hemos utilizado la partitura original, con arreglos orquestales de Efraín Ríos y David Guerra. La coreografía ha sido concebida por Iván Tenorio, ese maestro del Ballet Nacional de Cuba. En esta ocasión los bailables son interpretados por miembros del Ballet de la Televisión Cubana, dirigido por la profesora Christi Domínguez. Pienso que uno de los aspectos que contribuyen al lucimiento de los actores/cantantes está dado por el montaje de voces y las clases que imparte la cantante y profesora Gladis Puig… Indudablemente es uno de los pilares que contribuye a otorgarle el nivel que exige un empeño de esta naturaleza y Gladys participa y está presente no solo durante el montaje, sino su apoyo continúa hasta las funciones. -¿Alguna otra razón para haber seleccionado a Chicago como el próximo estreno de Mephisto Teatro? Aunque el argumento es conocido, sus clímax y anticlímax, dentro del guión de un gran musical arquetípico, propician un canal de comunicación que atrapa al espectador. Por eso elegimos este título. El móvil de los celos lleva al asesinato a una célebre cantante, quien se encuentra ante el engaño de su esposo con una artista que anhela llegar a ser una estrella en el canto. "Ella lo mata y la encarcelan, en medio de canciones muy hermosas que comunican las emociones de los protagonistas al público. Y todo el argumento va mostrando distintos aspectos de la corrupción al aplicar la justicia que imperaban en el Chicago de principios del siglo pasado, más exactamente en l920." -¿Recontextualizaste en algún sentido la época? -La trama puede estar ocurriendo en cualquier tiempo y espacio. Y el vestuario responde a este concepto, hermosamente diseñado por Mailín Álvarez, quien también realizó el diseño de los trajes para la puesta de Plácido. No hemos seguido las pautas de la película. Hemos interpretado los espacios conceptualmente, pues damos la impresión de que la acción se desarrolla en una gran cárcel." -¿Quiénes forman parte del elenco? -El noventa por ciento son actores que integraron el reparto de Cabaret y tenemos dos invitados: Maylú que interpreta a Roxy y Carlos Pérez Peña, en el papel de Ebos. El resto son actores de la compañía que el público los conoce por Cabaret, por Plácido y por Huevos, como Raysel Cruz, Enrique Estévez, Araina Begué. "Algo muy importante es observar cómo se va viendo en ellos la madurez artística en el conocimiento de este género tan difícil y como estos actores van ganando en experiencia. -¿Por qué Mephisto Teatro incursiona con tanta incidencia en el teatro musical? -Como parte de nuestra estética enfocamos nuestro lenguaje a partir de una realidad incuestionable: el cubano es muy musical, pues llevamos el ritmo adentro. Este género o especialidad del teatro, está relegado y para nosotros resulta muy importante adoptar sus códigos a la manera de hacer teatro y el público lo agradece mucho. No pretendo decir que soy el único al hacer este tipo de teatro, pero sí quisiera trabajar durante un largo tiempo, aunque incidentalmente asumamos otro género. Pero Mephisto, fundamentalmente, quiere hacer muchos musicales. -¿Cuáles son los códigos básicos de la compañía al abordar esta vertiente de las artes escénicas? -Fundamentalmente manejamos dentro de la compañía el concepto visual del espectáculo. Para nosotros es muy importante lo que el público ve y cómo lo ve. En este caso, recurrimos siempre a un diseño que lo lleve a una idea, a una percepción conceptual del espectáculo. Esa es una de las premisas nuestras, aunque también tenemos los textos de los grandes musicales y rescatar grandes textos y grandes puestas que se hicieron aquí en nuestro país de este género como Las vacas gordas y vamos a tratar de hacer Rachel. También estamos pensando en ese gran musical de los años 60, relacionado con los hippies. -Te considero como un diseñador de luces de excelencia, ¿las vas a diseñar para esta puesta o lo hará otra persona? -Voy a diseñar las luces. Existen pocos recursos en estos momentos en la sala, pero quisiera realizar una iluminación acorde a los presupuestos del montaje. Aunque en otras puestas lo he entregado a otros, porque al igual que esta joven diseñadora de vestuario, existen muchachos muy capaces que se estén desenvolviendo en este campo. El diseño de luces es muy importante en estos momentos dentro de la dramaturgia de un espectáculo. -¿Vas a utilizarlo para lograr efectos cinematográficos como en otras ocasiones? -Hay momentos en que muevo la luz, como si la cámara estuviera alrededor de estas luces y de los actores. -También quisiera saber si vas a emplear algún equipo de retroproyección o que incluya la concepción audiovisual… -Existe un elemento dentro de la escenografía, como parte del concepto de puesta en escena, cuando los fotógrafos aprietan el obturador, que esa foto se ve proyectada inmediatamente en escena, de una manera muy recreada de la época en una pantalla." -¿Cómo podrían calificarse estas incursiones de Mephisto en el musical? -Son sueños que convertimos en realidad en el universo mágico del teatro y donde nos hacemos cómplices del hecho escénico por la magia del canto, el baile y la actuación".